Los primeros pasos del bebé
No hay nada más placentero y a la vez más desafiante para los padres que el poder ver que su bebé empieza a dar sus primeros pasitos. Es un momento realmente especial, que marca una etapa.
El bebé crece, ya se sienta, se levanta, da vueltas, se pone de pie, se agarra a los barrotes de la cuna, y desde hace algunas semanas no para de arrastrarse y de gatear por todos los rincones de la casa. Su sentimiento de libertad es contagioso. El poder moverse es divertido y un paso importante en el desarrollo de sus destrezas y confianza.
El bebé ya no para de moverse. Ahora se distrae sosteniéndose en los muebles y en todo lo que pueda, para buscar apoyo y estar de pie por más tiempo, y poder interactuar con las personas y las cosas.
Falta muy poco para que él camine por sí mismo. Falta poco para que vosotros, los padres, se sitúen a una distancia de él, y le llamen para que camine hacia vosotros. Y el bebé vendrá, sonriendo, con los brazos algo equilibrados, y dará un paso tras otro, hasta poder abrazarlos. Os sentiréis los padres más felices y orgullosos del mundo, y vuestro bebé estará cumpliendo más una etapa de su crecimiento.
La edad de los primeros pasos
No existe una edad determinada para que el bebé empiece a caminar. Es igual cuando el bebé dice la primera palabra o el primero balbuceo. Algunos bebés empiezan a caminar a los nueve meses, y otros a los 12 o 13 meses de edad. Los padres solamente deben empezar a preocuparse cuando el bebé no camina a partir de los 18 meses. En este caso, es necesario que acudan al pediatra para que reciban la orientación necesaria, o que descarten algún problema en este sentido.
Algunos expertos afirman que el caminar del bebé es genético. Si sus padres caminaron en una edad temprana, el bebé también lo hará. Lo mismo ocurrirá si hubo algún retraso. Aparte de eso, el caminar temprano o no está relacionado con el físico del bebé, con su peso, su estatura, si tiene algún problema o algún trastorno, si hace ejercicios, si recibe o no estímulos en este sentido. Todo depende también de su entorno.
Pasos seguros
La independencia no siempre es algo muy fácil de alcanzar. También necesita orientación y apoyo. Y muchísimo control. Cuando los padres notan que el bebé desea dar sus primeros pasitos, sin sujetarse en sus dedos o manos, o sin agarrarse a los muebles, el cuidado y la seguridad es muy importante. En esta etapa, una caída puede representar una vuelta atrás en el proceso. Por esta razón, es sumamente necesario que mantengan al bebé siempre en un ambiente protegido y con seguridad. Eso quiere decir que el bebé debe moverse en un ambiente seguro, donde no haya objetos puntiagudos, ni esquinas sin protección, y libre de riesgos como los enchufes de electricidad expuestos. Que sea un ambiente tranquilo, limpio, y con mucho espacio libre.
Cuando el bebé se cae
Muchas veces las caídas son inevitables. En el caso de que el bebé lleve algún golpe al tentar mantenerse de pie solito, cuidado para no asustarle más con tu reacción. El miedo, el susto, y la inseguridad también se aprenden. Cuando el bebé se golpee, intente calmarle y consolarle con ánimos, para que él vuelva a intentar caminar otra vez. Felicítale por la tentativa, y refuerce positivamente su esfuerzo para moverse. De lo contrario, el bebé solo valorará el fracaso, se frustrará, y sentirá que su tentativa de caminar no vale la pena. Si sigues animándole, muy pronto te verás sacando una foto o filmando a tu bebé dando sus primeros pasitos.
Fuente: GuiaInfantil
Enlace artículo